Como la mayoría de las drogas, el coaxial originalmente fue inventado como un medicamento. Posteriormente y a pesar de todo, los drogadictos se dieron cuenta que era totalmente legal y que era un antidepresivo no muy caro, por lo que les podría servir de droga dura si lo inyectaran por vía intravenosa. No se sabe a quien primero se le ocurrió esta idea, pero ahora hay una gran cantidad de drogadictos en todo el mundo que están practicando esta forma de consumo de droga. El drogadicto adquiere en una farmacia las píldoras de coaxial, las muele hasta hacerlas un polvo, la disuelve en agua y "se las mete en la vena." Por supuesto, obtener un polvo fino en casa es casi imposible, y con una inyección en vena, en la sangre penetran grandes cristales insolubles, lo que lleva a una trombosis. El daño del consumo de drogas en este caso es incalculable.
Incluso el consumo por vía oral de este fármaco puede causar efectos graves. Incluso, después de varias semanas de tratamiento médico contra la depresión, los dientes del paciente se destruyen completamente y hay que extraerlos. No es difícil de adivinar a cuales consecuencias puede llevar el uso de coaxial por vía intravenosa, algo muy practicado por los drogadictos. Después del contacto con el este fármaco la sangre se coagula, y después de unas cuantas docenas de inyecciones comienza a desarrollarse la necrosis, convirtiéndose en una gangrena general en casi todo el cuerpo.
"La ansiedad" provocada por el coaxial, por su grado de gravedad supera a la heroína. Al dejar de consumir drogas, muchos mueren de insuficiencia cardíaca, incluso aquellos que por gozar de una buena salud han podido sobrevivir nunca se podrán deshacer de la dependencia psicológica y la propensión a la depresión. Al perder la capacidad de sentir las experiencias positivas de la vida, muchos ex drogadictos de coaxial se suicidan, son incapaces de sobrevivir las circunstancias de la vida que le han caído encima.
Como resultado, la persona que una vez comenzó a consumir coaxial como droga, se puso a sí mismo para siempre una cruz. A partir de este momento le quedan 3 caminos: la muerte por gangrena, por ansiedad, o en el mejor de los casos, dada la palidez de su rostro y la miserable vida, careciente de la capacidad de alegrarse y disfrutar de cualquier cosa, le da lo mismo vivir que morir.