Kyzylgyul Yasin kyzy Abbasova
Preguntas
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Los médicos evitan el término de “drogadictos recuperados”, y en vez de ello utilizan el término “drogadictos no activos” - o sea, los que no están consumiendo en un momento dado. ¿Acaso una persona nunca podrá perder esta etiqueta en la sociedad moderna? Incluso los médicos narcólogos opinan que sus pacientes siempre serán drogadictos. ¿Cómo podemos enseñar a la sociedad que los ex-drogadictos son unos componentes completos de la sociedad y que se les debe tratar adecuadamente?
Lo que pasa es que es prácticamente imposible curarse de ésta enfermedad. Claro está, no se debe considerarlos por maleantes. Hay que hacer un uso más activo de las posibilidades de las sociedades de drogadictos anónimos y de otras sociedades para que estas personas no se sientan segregadas y no tengan el deseo de involucrar a nadie más en sus asuntos oscuros. Uno no puede ser indiferente a éste problema, pues cada drogadicto es una personalidad y ciudadano perdida.
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¿Qué papel le asignaría Usted a la educación paternal y a las relaciones familiares en la prevención de la drogadicción?
Un papel muy grande. Por desgracia, los padres que tuvieron una pobre preparación prematrimonial, y tuvieron en su potencial los destinos corrompidos de sus padres, también se enfrentan a unos serios problemas. La práctica muestra que en las familias donde uno de los padres bebe o fuma, o no trabaja, o los padres no se llevan bien uno con el otro, o son personas con una visión o posición diferente, si la familia es necesitada, hay una mayor probabilidad de que los hijos sigan un mal camino.
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En la era del Internet y del crecimiento de sociedades virtuales, ¿cuáles deben ser los medios comunicativos de lucha contra la drogadicción? ¿Cuál cree Usted que sería el medio más efectivo, y como cree que debe actuar el gobierno para poder influir sobre los drogodependientes y llevar a cabo medidas preventivas entre la población sana?
Hace falta hacer una propaganda de unos hábitos de vida saludables, y lo más importante – desde la infancia misma promover el amor por el esfuerzo, hacer que la persona pueda desenvolver sus talentos, que pueda estudiar bien y que pueda tener una ocupación profesional. Hacen falta más concursos, competiciones, comunicación en todos los niveles y en todas las edades de la población. Hay que mejorar el nivel de vida y luchar, por otra parte, contra el malgasto, pues también hay drogadictos que viven una vida despreocupada con dinero. Hay que tener siempre en mente a éste grupo de personas, buscar a los “candidatos” a ser drogadictos, y luchar por sus destinos para que no se autodestruyan. En general hace falta una nueva civilización, nueva gente. A lo mejor será así, pero solo ocurrirá después de unos eventos serios que tendrán lugar como consecuencia de falta de consideración por uno mismo en nuestra vida. Hace falta una política gubernamental pensada donde cada uno de nosotros participe.