Alexander Mikhailov
Preguntas
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Los médicos evitan el término de “drogadictos recuperados”, y en vez de ello utilizan el término “drogadictos no activos” - o sea, los que no están consumiendo en un momento dado. ¿Acaso una persona nunca podrá perder esta etiqueta en la sociedad moderna? Incluso los médicos narcólogos opinan que sus pacientes siempre serán drogadictos. ¿Cómo podemos enseñar a la sociedad que los ex-drogadictos son unos componentes completos de la sociedad y que se les debe tratar adecuadamente?
Si a una persona se le sugiere la creencia (algo que se está haciendo ahora) de que tiene una enfermedad intratable, que no tiene oportunidades de volver a la sociedad, tantas menos oportunidades tendrá el de curarse. Hace unos años existía la prohibición de mencionar siquiera una posible recuperación. Se decía en plan, “¡para que los jóvenes no crean que ahora pueden chutarse, pues después les curarán!”. Hoy en día entendemos que dicha teoría es una salida sin callejón para la curación. Toda persona debería tener la esperanza de curarse. La diabetes no es curable, ¿pero acaso segregamos a los diabéticos? Cada persona tiene células cancerígenas, pero, ¿acaso le quitamos la esperanza a un enfermo oncológico? ¿Y qué pasa con la gente epiléptica?
Estas teorías se tienen que revisarse de raíz. Y la ayuda solo puede ser una – esfuerzo de la sociedad y gobierno para la reinserción social de gente en remisión larga. Conozco a mucha gente que pasó por el infierno de la drogadicción. Hoy son ciudadanos completos de nuestra sociedad.
Uno de ellos me contó (ahora trabaja en un gran negocio), “Sigo recordando el placer que me daban las drogas. Pero también me acuerdo de todos las consecuencias horribles de éste placer: abstinencias, rechazo de mis cercanos, la peste de sótanos y vómitos.... ¡Y ello se convirtió para siempre en una barrera que nunca cruzaré!”
La drogadicción puede ser vencida dentro del hombre solo con la condición de que se sienta necesitado. Ser necesitado por sus cercanos y la sensación de que aún puede realizar su potencial. Por desgracia aún no nos hemos decidido cuando a una persona se le puede devolver su carnet de conducir, cuando podrá volver al trabajo que tenga ciertos requisitos físicos. Y sin motivación, sin una luz al final del túnel, todo esfuerzo se irá en vano.
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¿Qué papel le asignaría Usted a la educación paternal y a las relaciones familiares en la prevención de la drogadicción?
¡Un papel clave! Unos sabios decían que al niño hay que empezar a enseñar desde la cuna. Cuando salga de ella se hace tarde. Pero hoy en día son muchas veces cuando se les empieza a enseñar cuando su mente ya está envenenada y su psíquica está derrumbada. Pero sinceramente creo que muchas veces los padres jóvenes mismos necesitan educación... Pero la esencia la habéis formulado bien: cuanto más unida la familia, más atención (atención real, no hipercuidado) se le da al niño, y tantas más probabilidades hay de crear a una persona con un desarrollo mental avanzado y físicamente sano.
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En la era del Internet y del crecimiento de sociedades virtuales, ¿cuáles deben ser los medios comunicativos de lucha contra la drogadicción? ¿Cuál cree Usted que sería el medio más efectivo, y como cree que debe actuar el gobierno para poder influir sobre los drogodependientes y llevar a cabo medidas preventivas entre la población sana?
La época del internet es una época de nuevos problemas colosales. Hoy en día una gran cantidad de personas por todo el mundo son verdaderamente adictas a él. Más aún, la criminalidad relacionada con las drogas se mueve activamente al espacio virtual. En la conferencia internacional “Khonlea” en Vietnam un representante del Interpol decía con mucha preocupación que por medio del Internet se llevan a cabo unas transacciones de venta de drogas colosales. También decía que es casi imposible a las fuerzas especiales seguirlas y reaccionar ante ellas cesando la actividad de los criminales – el Internet se ha convertido en un mercado para el negocio de las drogas. Nosotros en Rusia vemos como se usa activamente éste medio para la promoción de nuevos tipos de drogas, para un intercambio de experiencia en su producción, y como se usa para la propaganda activa de éste modo de vida. Por ello, disculpen mi tautología, la lucha informacional se debe llevar a cabo con medios informativos. Es imprescindible crear programas informáticos que bloqueen sitios web con propaganda narcótica, que identifiquen a sus propietarios, y que usen todos los medios permitidos por la ley para luchar contra ellos. Es una lucha que durará años, pues en estos instantes la época de la red mundial está solo empezando, y ni siquiera podemos imaginarnos los peligros que acarrea. Por ahora ésta actividad criminal tiene la ventaja. Y es más creativa que las autoridades. Y ello está claro – ellos no tienen reglas y leyes a qué atenerse, mientras que las autoridades tienen que resolver el problema al pie de la letra de la ley. Y les falta creatividad....
Eso significa que hay que buscar unos nuevos métodos de desarrollo de inmunidad contra dichas adicciones entre los jóvenes. En ruso hay un dicho, “un clavo quita otro clavo”. Ello significa que hay que crear unas condiciones aceptables para otras dependencias – un desarrollo harmónico de la personalidad, ambiciones sanas, unos pasatiempos culturales, científicos, técnicos, deportivos alternativos positivos. Es un problema muy complejo hoy en día. Por ello hay que utilizar relaciones comunicativas, entre ellas el Internet. ¡Clavo con clavo!