Paul Simon
Профессор Теологии и Религиозной мысли, Университет Южной Каролины. Докторская степень по Философии, Гарвард.
Preguntas
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En la era del Internet y del crecimiento de sociedades virtuales, ¿cuáles deben ser los medios comunicativos de lucha contra la drogadicción? ¿Cuál cree Usted que sería el medio más efectivo, y como cree que debe actuar el gobierno para poder influir sobre los drogodependientes y llevar a cabo medidas preventivas entre la población sana?
La drogadicción es un problema complejo. Se manifiesta en los ámbitos espiritual, moral, médico, gubernamental y social. Quisiera recalcar el acento en el ámbito espiritual. Practicamente todas las confesiones religiosas consideran que la drogadicción es un pecado grave, que es una enfermedad del espiritu y cuerpo que lleva a la muerte del alma. El drogadicto pierde su libertad personal que le fue otorgada por Diós y es en esencia un intento de suicidio. No obstante, si la persona quiere curarse puede intentar encontrar apoyo y soporte en la religión que le sea mas aceptable. Yo recuerdo miles de casos de cuando la creencia en Dios ayudaba a la gente a recuperar su fuerza interior. La espiritualidad es un instrumento potente que les da una moralidad superior y responsabilidad a la gente frente a si misma. Ello no se puede quitar de las cuentas.